Por otro lado me parece inaudito que el revuelo se haya montado por el comentario sobre las bodas de gays y lesbianas y por si tienen que llamarse o no matrimonio. Entiendo que alguien pueda molestarse por esa forma de pensar de la reina, pero lo que me parece mucho más importante es el tema de la educación.
Partiendo de la base de que desde hace años cada reforma educativa es para estropear lo poco bueno que quedaba de antes, ahora va la Reina y se mete en la cuestión de la educación para la ciudadanía.
En primer lugar, yo siempre he defendido que en vez de religión católica debe estudiarse una asignatura en la que, sobre todo, se estudie la Constitución Española y las principales leyes de españolas. No puede ser que en la formación escolar obligatoria no se estudien los derechos fundamentales de la persona o la composición de España tal y como vienen reguladas en la Constitución (así se sabría que, por ejemplo, en España no está abolida por completo la pena de muerte).
Que luego queda tiempo para estudiar religión católica, musulmana, judía, sintoísmo, brahmanismo, etc. pues estupendo. Lamentablemente, por lo que he visto ni siquiera en “educación para la ciudadanía” estudian la constitución…
Lo que no puede decir la reina es que debe estudiarse religión “porque la juventud necesita una explicación del origen de la vida”.
Por ahí, en mi opinión, vamos mal. Nunca he comulgado (perdón por la expresión, no lo he podido evitar) con que por no saber cómo se originó el inicio de la vida haya que aceptar que es cuestión de religión. El problema es que la ciencia todavía no ha encontrado la respuesta. De ahí a decir que la explicación tiene que darla la religión… pues es como decirle a un niño que la tierra es el centro del universo (cuidau que hasta hace bien poco decir lo contrario suponía la excomunión de la iglesia católica).
En definitiva: Digo yo, ¿no habrá que dejarle a la ciencia ese aspecto y dejar que las religiones se estudien en su ámbito filosófico?