lunes, 7 de julio de 2008

Sr. Miyagi

El viernes recibí un correo electrónico de uno de mis mejores amigos en la facultad. Cuando has pasado tantos años compartiendo horas y horas de mus y de cafetería (que al fin y al cabo eso es lo que es la carrera de derecho…) esa amistad dura para toda la vida.

Además con algunas personas se da la circunstancia de que pueden haber pasado 4 ó 5 años que da igual. Basta con saludarse, preguntar qué tal y esos años de incomunicación desaparecen sin que se necesite explicación alguna.

El amigo del que hablo es una extraordinaria persona. Inteligente, sincero y sin dobleces. Hace tiempo que conoció a una chica y se marchó a vivir con ella a Galicia. Siempre tuvo muy claro lo que es realmente importante en su vida y le admiro por ello.

Después de recibir el correo electrónico hablamos por teléfono y esa misma tarde, mientras veía un viejo episodio de “Doctor en Alaska” (Northern exposure), me encontré con este poema de Robert Burns que le viene que ni pintado a mi amigo y a su novia:
O, my love is like a red, red rose
that's newly sprung in June,
O, my love is like a melody that's
sweetly played in tune.
So fair art thou, my bonnie lass, so deep in love am I;
And I will love thee still, my dear
till a' the seas gang dry.

Till a' the seas gang dry my dear,
and the rocks melt wi' the sun:
And I will love thee still, my dear,
while the sands of life shall run.
And fare thee weel, my only love!
And fare thee weel awhile,
And I will come again, my dear,
tho''twere ten thousand mile ...
**********
Mi amor es como una roja, roja rosa
Que florece en junio
Mi amor es como una melodía que es
dulcemente interpretada en armonía.
Asi eres tú, mi hermosa amada,
Tan intenso estoy enamorado;
Y te seguiré amando, mi amor,
hasta que los mares se hayan secado

Hasta que los mares se hayan secado, mi amor,
Y las rocas se hayan fundido con el sol:
Y te seguiré amando, mi amor,
Mientras corra la arena de la vida.
Y me despido de ti, mi único amor!
Y me despido de ti por un momento,
Y volveré otra vez, mi amada,
Aunque esté a diez mil millas…

1 comentario:

H dijo...

ay, que ya no me quieres ni me respondes ni nada.... Mira que estaba yo ahí solícita a las 3 de la mañana y nada, oiga, se olvida de mí el señor arias!!!

Besitos, vida.

H